Hay algunos puntos importantes para poder ser candidato a un crédito hipotecario que van más allá de tener buenos ingresos mensuales o un historial crediticio impecable. Claro, sabemos que la estabilidad económica es un factor determinante, sin embargo, existen otros requisitos que debes considerar como por ejemplo:
Contar con historial crediticio: Existe un mito que asegura que aparecer en Buró de Crédito es malo, pero no es así. Todas las personas que han solicitado un préstamo están ahí, la diferencia radica en la cantidad de compromisos y en el score; sólo asegúrate de pagar a tiempo tus deudas. Si eres una persona olvidadiza, considera domiciliar tus pagos para evitar atrasos. Aunque la planeación financiera puede resultar un reto para muchas personas, debes pensar que de eso dependerán tus próximos movimientos financieros.
Contar con un ahorro: La gente suele pensar que un crédito hipotecario puede cubrir el 100% del costo de un inmueble, y lamentamos decirte que no es así. Las instituciones financieras suelen prestar del 80 al 90% de este valor, lo demás equivale al enganche que el comprador debe pagar al vendedor.
Pero ese no es el único gasto que debes hacer, también debes contemplar el avalúo, los gastos notariales, la comisión por apertura, entre otros gastos que pueden surgir.
Ingresos regularizados y recibos de nómina timbrados: Es necesario que tus ingresos estén regularizados por el Servicio de Administración Tributaria (SAT) y que tus recibos se encuentren timbrados.
También, no te preocupes si eres un emprendedor o trabajador independiente, puedes comprobar tus ingresos a través de la declaración anual. En este caso, no se requerirán recibos de nómina timbrados, pero sí la constancia de que estás pagando tus impuestos.
Si te surge alguna duda no dudes en contactarnos, en Finhaus ¡estamos siempre contigo!